viernes, 11 de septiembre de 2009

Gil [!]


En este momento puedo decir que no duele el alma de extrañarte, de necesitarte, de no poder tenerte. Por que puedo sentirme feliz de tenerte de vuelta en mi vida, a medias, pero tenerte al fin. Esta noche mi dolor tan grande en el corazón, es por darme cuenta de lo que sufriste, de lo mal que la pasaste y de lo que te lastime. Sin ser esa mi intención, pero lo hice y es algo que no me puedo perdonar, me lo reprocho cada día. Es que no llego a entender como se puede ser tan gil de lastimar a la persona que mas te importa, esa persona por la que darías la vida, tan solo por verla feliz. Esa misma persona por la cual harías el ridículo sin dudarlo o pasarías por el papelón mas grande de tu vida con tal de robarle una sonrisa. Esa enorme sonrisa, de esa dulce boca, que con solo sentir que vas a sonreír mi mundo se ilumina. Como si esos dientes fueran un sol. Y se detiene todo, no importa nada. Se podría caer el universo entero a pedazos y juro que yo solo estaría pendiente de tu boca. Hoy se que te hice mal y por ahí algún día tenga tu perdón, no lo se, de lo que si estoy seguro es que yo nunca me lo voy a perdonar. Así como también estoy completamente seguro que no me perdonaría arruinar todo si la vida me diera esa oportunidad que le pido cada noche antes de acostarme para intentar soñar con vos. Esa oportunidad de caminar, por eso que llaman vida, a tu lado. Esa oportunidad. Tan solo una…

No hay comentarios:

Publicar un comentario